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| Los habitantes de Zacapala aseguran que para los niños, es una meta vivir en Los Ángeles y comprarse una troca (camioneta), como las que han visto de sus parientes, amigos o conocidos. |
En Zacapala, al norte de la Mixteca Poblana, la migración se vive, se respira y se siente tanto como el calor que azota al municipio en los últimos días de agosto, cuando raya el sol de mediodía.
Ahí, los cuatro mil 224 habitantes contados por el Consejo Estatal de Población (Coespo) conocen (al menos) a una persona que ha dejado todo y se ha ido con documentos o sin ellos, a probar suerte a Estados Unidos; especialmente, a Los Ángeles, California.
Por eso, no es raro notar rasgos de la influencia estadounidense desde la carretera de acceso, donde una de las casas ubicadas al pie del camino –por ejemplo– tiene estacionada una camioneta con una calcomanía de la bandera americana en la defensa, con una leyenda que reza: “God bless America”.
Al internarse en el pueblo, las fachadas están remozadas o los inmuebles han sido ampliados; lo que muestra la llegada de remesas y además, la mayoría de las calles principales ha sido adoquinada.
Pocos hombres; familias divididas
Todo esto pese a que es posible ver a pocos hombres jóvenes y maduros. Por las calles, abundan los niñosde preescolar y primaria, las mujeres jóvenes y los ancianos, en vez de quienes podrían contarse como la fuerza productiva del municipio.
La explicación se encuentra al hablar con los lugareños: Muchas de las familias en Zacapala están divididas gracias al añejo y ansiado “sueño americano”.
Si una pareja tuvo más de dos hijos, es muy posible que la mitad de ellos esté en Estados Unidos y resto en México, y que quienes viven en el extranjero, envíen recursos a los adultos mayores o apoyen a mejorar la infraestructura pública.
A cambio, los que se quedan cuidan de los más viejos y se resignan a sólo escuchar a sus parientes por teléfono fijo, a conocer a sus nietos o sobrinos por fotografías y en los casos más afortunados, a verlos una vez cada tiempo; porque ahí, el internet y la señal de telefonía celular, escasean.
La vida americana, una meta
Pero toda esa desintegración, el encarecimiento de los servicios de los “polleros” o el endurecimiento de las políticas migratorias en Estados Unidos, no desalientan las aspiraciones migratorias de las nuevas generaciones.
Por el contrario, los habitantes de Zacapala aseguran que para los niños, es una meta vivir en Los Ángeles y comprarse una troca (camioneta), como las que han visto de sus parientes, amigos o conocidos.
Sostienen que los adolescentes abandonan la educación secundaria sin concluirla, para reunirse lo más pronto posible con alguien “del otro lado”, buscar un trabajo, “hacer fortuna” y engrosar la estadística de migración que sólo en 2010, ubicó a 140 poblanos en Estados Unidos.
Un pueblo ligado a Oportunidades
Zacapala está considerado por el Consejo Estatal de Población como el séptimo municipio con mayor nivel de emigración hacia la Unión Americana en todo el estado de Puebla.
Las cifras del gobierno estatal señalan que una de cada 10 viviendas a por lo menos uno de sus integrantes fuera del país y que 20 por ciento de los hogares reciben remesas (recursos del extranjero).
Sin embargo, su gente vive al abrigo de programas asistenciales como Oportunidades, que al menos en 2010, había repartido cinco millones 736 mil pesos entre 774 familias.
Esa cantidad es igual a 68 por ciento del total de los hogares censados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) y casi el doble de los hogares que son totalmente encabezados por una mujer.
Además, las cifras consultables en el portal de INEGI del reflejan que esta cantidad erogada por la Secretaría federal de Desarrollo Social (Sedesol) sería equivalente a prácticamente a cuatro de cada 10 pesos del presupuesto municipal y una quinta parte de los 28 millones de pesos destinados al combate a la pobreza en la zona.
